NIcolás Yerovi y algunos toques de genialidad

Me entero recientemente que Nicolás Yerovi está presentando una obra en Barranco: "Titina", que él dice única en el mundo, convencido como siempre de su talento y originalidad. Nada humilde el escritor y menos frente a un Chema Salcedo que le sigue la corriente en su Fulanos y Menganos.

Pero honor a la verdad, el humorista injustamente conocido más por sus "Monos y Monadas" que por sus novelas y obras, tiene destellos de genialidad. Hasta en el aparente facilismo encontramos frases que nos dan la equívoca apariencia de "yo lo pude escribir primero", ante lo que surge el inevitable: "pero no lo hiciste, pues".

Este es el comienzo de una novela breve en clave de humor "Tarjeta Amarilla", de factura irregular, pero con momentos como esta descripción inicial del personaje principal:

"Tenía cuarenta años, seis corbatas y ningún remordimiento. Podría decirse, además, que era un hombre anticuado: le gustaban las mujeres."


Con sólo ese inicio quedaron pagados los magros siete soles que me costó el ejemplar hace unos años (y de verdad, siendo estrictos son las primeras páginas casi lo único rescatable de ese libro). Allí está resumido, en ese párrafo citado, el mejor Yerovi. Si tienen suerte quizá aún encuentren esa novelita, donde en forma dispareja despliega un mejor humor que el que muestra a cuenta gotas y casi por cumplir en el diario Perú21.

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